La historia de Marta


“Para mí una vida sin limitaciones significa hacer mi día a día de una manera totalmente normal, poder hacer todo lo que hace la gente de mi alrededor e incluso superar mis límites y hacer cosas que otros no hacen.”

Marta Casado es una atleta y estudiante de periodismo que a los 14 años fue diagnosticada con osteosarcoma óseo, un tipo de cáncer de hueso. A los 16 años le amputaron la pierna izquierda, pero superó el cáncer. Unas semanas después de tener su prótesis deportiva, entró en un programa de promesas paralímpicas de atletismo con el que ha estado competiendo este verano en el mundial sub-20 de Suiza. Marta también pratica gimnasia rítmica y, aunque no compite, hace exhibiciones y bailes en galas de grandes eventos, como el TEDx Valladolid.

  • ¿Podrías contarnos cómo fueron tus primeros días tras la amputación? ¿Qué fue lo más determinante en esos días?

Después de mucho tiempo con dolores en la pierna, la amputación fue un momento que se podría definir como bueno, ya que desaparecieron estos dolores y sabía que iba a empezar de nuevo ya curada. Estaba deseando iniciar esa nueva etapa de mi vida.

  • ¿Cómo fue la rehabilitación y cuáles consideras que fueron las medidas más relevantes?

La rehabilitación al principio fue dura por las curas en el muñón y la recuperación de la sensibilidad, pero en el momento en el que empecé a caminar, mi rehabilitador fue muy importante y me hizo ver que no era tan difícil como yo pensaba.

  • ¿Cuál crees que fue el impacto más importante de tu vida?

El impacto más importante de mi vida fue el momento de mi diagnóstico y el día que me curé y superé el cáncer.

  • Tu nivel de actividad es muy inspirador. ¿Nos puedes describir tu rutina diaria? ¿Tienes alguna afición?

Me gusta hacer todo tipo de cosas. Cuando no tengo que ir a la universidad me gusta ir al gimnasio y desconectar practicando bailes de gimnasia rítmica, salir por la ciudad o ir al campo.

  • ¿Podrías describirnos tus planes de futuro?

Me encantaría participar en los juegos paralímpicos algún día y, en cuanto me pueda operar para estar al 100 %, empezaré a entrenar y a darlo todo para lograr mi meta.

  • ¿Qué papel juegan la rodilla RHEO KNEE XC y el pie Pro-Flex XC en tu vida diaria y cómo influyen en las actividades que realizas? ¿Cómo te ayuda esta tecnología a vivir una vida sin limitaciones?

Me aportan seguridad en mi día a día, forman parte de mí y noto la rodilla y el pie como propios. La rodilla me ayuda en el caso de que tropiece y eso me da seguridad a la hora de hacer todo lo que quiera sin preocuparme, también me hace la vida más fácil al poder subir y bajar escaleras. Parece algo sencillo, pero realmente lo aprecias cuando llevas prótesis. El pie que llevo ahora me permite ser mucho más dinámica en mi día a día y a hacer los deportes que me apetecen.

  • ¿Qué consejo puedes dar a los jóvenes que han «perdido» una parte de su cuerpo?

Que al principio no es fácil, sobre todo para las personas que tienen que asimilarlo de un día para otro. Necesitas tu tiempo para asimilarlo, y en el momento en el que lo haces, tienes que emplear todas tus fuerzas en salir adelante y, como en mi caso, aprender a caminar de nuevo, pero puedes salir muy fortalecido de la experiencia.

“Las prótesis me aportan seguridad en mi día a día, forman parte de mí y noto la rodilla y el pie como propios.”
La elección de Marta

Marta usa el pie protésico Pro-Flex XC, un pie resistente al agua que reduce la necesidad del usuario de impulsar el cuerpo hacia delante y ayuda a igualar la longitud de la zancada, combinado con una RHEO KNEE XC. La rodilla biónica le proporciona la estabilidad y la seguridad que necesita, capaz de sentir el momento en el que empieza a trotar o correr. La rodilla también reconoce cuando empieza a pedalear o subir escaleras, y se adapta en consecuencia.